Cosa Exquisita

Mas quisiera ella tener el consentimiento de la razón para poder llevar a cabo toda acción que merece sentir su corazón, embarcarse en un buque de pasión que navega por el amazonas personificado en la fuerza de su pecho acojedor y misterioso que embarga a su semblante. Esta fuerza nutre de ansiedad y angustia a los corazones de estos locos amantes, ésta misma fuerza proveniente de las más feroces vertientes de fuego se transforman en un angosto afluente que aprovisiona todo el maravilloso poder de tenerlo entre sus entrañas ella a él y él a ella. Una vez trancurrida la posesión la fuente de energía que emana de los cuerpos fogueados en pasión y lijeramente asustados por la emoción del pavor que asiste al furtivo encuentro de los deseos de cada uno, convierte sus almas en un sólo ente personificado en un abrazo constrictor que los dejará profundamente conectados sin medir las proporciones de su abrazo.

Mágico Sucedáneo

Pena sintió ella cuando se percató de que al son de su pasión ofuscose tanto la voz de su interlocutor, sin más pena que razón aquél día no comenzó con la alegria y la devoción de la tentación humeante que enciende el atrever prohibido...cuando se enrarecía el aire, poco a poco se dejaba sentir el fuego quemante de la osadéz pocas veces percibida cómo algo correcto. Pero entre tanta escabullida sensación de posesión sucede lo mejor que antecede a la tentación, el reclamo del autoplacer concebido por orden y gracia de la sugestión de tenerlo entre mis piernas y sentir como se transforma en un auténtico sucedáneo del placenter que distribuye el propulsor de toda mi inspiración...el fruto turjente que recorre los más infinitos caminos conducentes a la villa carnal que se emplaza en mi silueta, silueta que zigzageantemente reacciona ante su magistral rectitud y potencia impulsora que hace gemir la voráz contienda del deseo.

Pensando seriamente en convertirse en malvada>>>

Sí...dice ella, asintiendo con la cabeza, a aquel muchacho que permanecía encubierto en la vereda, fijándose cuidadosamente en como ella caminaba, en el armonioso andar de sus caderas, ella se conduce con desencia y mucha convicción de hacer suyo a cualquier maestro del arte del amor que araviese en su rumbo. Pero al mismo tiempo siente repulsión por el hecho de querer tener lo complicado, lo difícil de alcanzar....porque para ella no hay situación más excitante que lo prohibido, curiosamente ésto se ha convertido en una llamarada intensa que recorre el vientre candente y deseoso de recibir las más cruentas envestidas y estocadas de su oponente, que la hagan sentir que todo esfuerzo ha valido la pena, aún cuando siente que en si misma existe una prisión, prisión que a todas luces se convierte en el alojamiento de las intenciones malvadas de su cuerpo hacia otros maestros que profesan ser extremadamente extenuantes a la hora de cometer la labor carnal, pero que enseguida acusan lo que son, sólo espejismos de cansado sudor, de falsas experiencias e impostoras expectativas. Recurrentemente ella ha recibido estos sometimientos, tratos que han quedado impuestos en su figura, pero que la han hecho resurgir como si se tratase de la mejor de las envestidas del ave fénix...que más que asusar al temperamento del destino, no hace mas que imponerse ante tanta bestia sometida a los sin sabores de las custumbres mal percibidas del entorno que le toca presenciar.

El juego peligroso....

Ese dia, ella se entretuvo con tantos dimes y diretes que le profesaba su interlocutor, aquél hombre del que emana una fuerza magnética, que figura como un joven misterioso entre la penumbra de sus pensamientos, pensamientos que ella cree que puede volver reales, hasta el punto en que ella siente que la fuerza de este ser llega a ser irresistible... la enloquece de sólo saber que sus besos y abrazos pueden transformarse en el más frondoso de los parques del placer, en un jardín hermoso y lleno de flores que acrician el vientre de ella junto al tallo turjente que persigue a los pétalos caídos desde el núcleo de tu frente. Mejor aún suena esta historia cuando se trata de dos cómplices obligados al silencio, pero desatados al bullado elixir que significa ser uno los "dos". La pena y la culpa no existen, porque entre ellos dos, sólo recorre una infinita pasión que los invita a habitar la tierra de lo inexplorado y lo prohibido como si se tratara de un juego...salir a buscar , salir a buscarte mi amor entre tanta locura, tenerte entre mis brazos ha sido y será, por mucho tiempo, el mejor de mis sueños mojados.